Gabriel deja el sector metalúrgico por la industria farmacéutica

Gabriel deja el sector metalúrgico por la industria farmacéutica: «Lo volvería hacer en un santiamén».

Hace poco más de un año, Gabriel decidió trabajar como técnico de mantenimiento en el sector farmacéutico tras desempeñarse durante muchos años en la industria metalúrgica. Gabriel comenzó a través de Let's Work y, tras un periodo como empleado temporal, consiguió un contrato permanente. El sector metalúrgico está en las antípodas del farmacéutico en lo que respecta al tipo de entorno de producción. Y sin embargo, se siente como pez en el agua con su bata blanca en un entorno productivo inmaculado.

Solucionador de problemas técnicos

¿Su trabajo? La responsabilidad de unas líneas de producción fiables recae en Gabriel. Repara las averías, ajusta las máquinas y ayuda a los operarios a solucionar los problemas técnicos. No hay una jornada igual a otra. Un día se concentra en las tareas de mantenimiento preventivas. Al día siguiente, se luce con su lado resolutivo cuando una avería requiere una rápida intervención.

Tiempo libre gracias a los turnos de trabajo.

Y no lo hace solo. Un equipo conformado por diez técnicos cubre tres turnos para garantizar una producción sin interrupciones. Gabriel: «Cubro alternadamente los turnos de mañana y tarde. En ocasiones, reemplazo a un colega del turno de noche. Nuestro equipo garantiza el debido apoyo técnico en cada turno. Por cierto, trabajar por turnos ha sido mi propia elección. Para mí, tener tiempo libre durante el día vale su peso en oro».

Buena formación

Incluso después de un año, Gabriel no cesa de aprender todos los días: «No paro de aprender de mis colegas y supervisores. Gracias a la formación que recibí, me sentí bien en mi trabajo de inmediato. Todo se explica detalladamente. Todas mis preguntas reciben una respuesta. Todos son apacibles y amigables. Nadie se siente cohibido a la hora de hacer preguntas. Esto nos permite aprender rápidamente y apoyarnos mutuamente como equipo».

Un enlace que cuenta

Gabriel rememora con satisfacción su decisión de cambiar de trabajo: «Si tuviera que hacerlo otra vez, no dudaría en tomar la misma decisión. Trabajo codo a codo con los miembros del equipo al mismo tiempo que formo parte de un grupo internacional. Participamos en la comunicación general, por lo que sabemos lo que ocurre en la empresa. En consecuencia, somos conscientes de que, desde nuestra propia posición, somos un eslabón importante del todo internacional. Y eso me satisface».